00093.¿Hacia donde abrir la puerta de nuestros razonamientos?
La impulsividad/reflexividad como el estilo cognitivo básico en la comunicación del conocimiento y la sabiduría.
Hay puertas abatibles que se abren hacia afuera y sin esperar a ser picaporteadas. Estas puertas destapan el interior del continente a veces sin una razón racionalizada y puede llevar a chocar el faldón con los elementos de la extrademarcación. Esos elementos son, en el símil que estamos construyendo, los transeúntes.
También hay puertas, abatibles, que lo hacen hacia adentro y generalmente a requerimiento del visitante con el aldabón y casi siempre con objetivos conocidos o cuestionamientos trascendentes.
Según uno de los estilos cognitivos, el de impulsividad/reflexividad, en las situaciones anfibológicas o de desconfianza el ser humano elige entre actuar, a riesgo de errar y perder el tiempo, o evaluar la acción, que si bien minimiza los errores también conlleva una perdida de tiempo, a veces, pero recompensable. Así, el segundo de este estilo cognitivo tiene la querencia de inhibir las respuestas iniciales reparando en las mismas al objeto de evaluar un mayor grado de precision.
De esta suerte, los conocedores y sabedores impulsivos suelen mostrar la tendencia a abrir, hacia afuera y sin llamada previa, la puerta de su pensar, a riesgo de que en la antepuerta no haya interesados persistentes o pertenezcan a un mundo ambiguo y receloso. Y esa propensión, las más de las veces suele ocurrir por el deseo de un éxito rápido que satisfaga el ego cognoscente. Por otro lado, los entendidos y avezados reflexivos suelen abrir la puerta de su reflexionar hacia adentro y a demanda del picaporteador. Con ello aumentan un éxito, demorado, sobre la base de menos riesgos al tratarse de interesados y mas cognoscentes buscadores.
Nosotros queremos decir con el símil de la puerta que no tenemos interés en interesar a quien no esté interesado. El interés es un problema cuya solución no se necesita salvo que sea significada por el mismo interesado.
03/12/2012 e.c.
Pylon & Sánchez